Itineraria de reflejos, lírica y melancólica, dejo parte de mí en cada paisaje que visito, pero no hallo donde quedarme.. empapado, continúo mi camino, a donde quiera que dé.

Cierra los ojos, mi niña,
quiero decirte algo
y si me miras
no encuentro las palabras.

Quiero decirte
que he visto un mundo
ahí afuera
árido, antipático
y no me gusta.
Que soy
pequeño y humilde,
que no llevo paraísos en los bolsillos
ni conozco llaves para el cielo.
Que la luna está ahí arriba
y yo no sé bajarla.
Que el mar es el mar
y yo
sólo un bichito.

Quiero decirte, mi niña,
que he visto un mundo
aquí adentro
y me gusta.
Y tú eres
con quien quiero compartirlo.
Que he visto un mundo
en ti
al que quiero pertenecer
ahora,
ya.
Quién sabe hasta cuándo.

Que te amo hasta donde sé amar
y que siento
que sólo sé hacértelo ver
en un beso
o un abrazo.
Que sabes,
porque lo sabes,
que a gusto habría dado la vida
por ahorrarte
aquella lágrima.

Cuando ahora abras los ojos,
mi niña,
si, por el motivo que sea,
deseas hacerme feliz...
Sonríe.