Itineraria de reflejos, lírica y melancólica, dejo parte de mí en cada paisaje que visito, pero no hallo donde quedarme.. empapado, continúo mi camino, a donde quiera que dé.

Ayer un cuervo
llegó al barrio.
Apostado frente al balcón,
parecía observarlo todo
con indiferencia.
Hoy una urraca
vuela divertida
de antena en antena.