Itineraria de reflejos, lírica y melancólica, dejo parte de mí en cada paisaje que visito, pero no hallo donde quedarme.. empapado, continúo mi camino, a donde quiera que dé.

Ha sido un año de cuidar de ti, a mi absurda manera (quizá la que pedías).
De cada día, tú eras el momento.
No sé si me descuidé, o yo también me di lo que necesitaba.
Ahora vivo. Y llevaba un tiempo sin hacerlo.