Itineraria de reflejos, lírica y melancólica, dejo parte de mí en cada paisaje que visito, pero no hallo donde quedarme.. empapado, continúo mi camino, a donde quiera que dé.

.

Cada mañana una cabriola,
un giro, un guiño, una cita..
un saber estar
y saber irse a tiempo,
un don, un oficio,
un recorrido..
una opinión
o confesión, que no se le distinguen..
Cada mañana
de cada hoy, a medio camino
del desengaño y la ironía,
de quien conoce
y aprende,
un señor, don, caballero,
maestro.
a Manuel Alcántara