Itineraria de reflejos, lírica y melancólica, dejo parte de mí en cada paisaje que visito, pero no hallo donde quedarme.. empapado, continúo mi camino, a donde quiera que dé.

Doblando la esquina
de una noche mágica
hacia un día abierto,
al otro lado del cristal
amanece lloviendo.
Amanece, y el cielo es
como un espejo del mío,
y todo el aire tiene un color
como de mi tierra.