Itineraria de reflejos, lírica y melancólica, dejo parte de mí en cada paisaje que visito, pero no hallo donde quedarme.. empapado, continúo mi camino, a donde quiera que dé.

Y bailamos, llevamos toda la mañana deseando bailar, soltarlo, gritar con nuestros cuerpos.
Y cantamos, nuestras sonrisas bailan a la mañana llena de luz, que nos contagia su fuerza y alegría.

La mañana se viste de abrazos, como plumas de un colchón que nos arropan al final de un bello sueño.. hoy todos despertamos acompañados.