Itineraria de reflejos, lírica y melancólica, dejo parte de mí en cada paisaje que visito, pero no hallo donde quedarme.. empapado, continúo mi camino, a donde quiera que dé.

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Se ha posado
el hielo en la hierba
y amanece el día
como si no supiera hacerlo.
Una luz grisácea
invade la mañana,
fría
como el alma del poderoso.
No es de noche,
ya no hay luna ni estrellas,
pero tampoco de día,
hoy al alba
se le han pegado las pestañas.