Itineraria de reflejos, lírica y melancólica, dejo parte de mí en cada paisaje que visito, pero no hallo donde quedarme.. empapado, continúo mi camino, a donde quiera que dé.

La hiedra yerma abraza la alambrada, obscena y retorcida, bajo la lluvia fría.. hay momentos en que se hace difícil provocar una sonrisa, incluida la propia.