Itineraria de reflejos, lírica y melancólica, dejo parte de mí en cada paisaje que visito, pero no hallo donde quedarme.. empapado, continúo mi camino, a donde quiera que dé.

Un gorrión se lleva un trozo de pan que a la paloma le ha parecido pequeño, mientras el sol comienza a calentar el hormigón de la fachada donde una mujer cepilla una enorme alfombra tejida por esclavos extranjeros.